El suelo es el más antiguo de los materiales de construcción. El hombre descubrió que podía moldear la tierra en bloques que, secados al sol, le servían para hacer los muros de sus casas y aprendió también cómo hacer túmulos de tierra para construir elevadas plataformas para el culto, mucho antes que descubriera cómo leer y escribir.

El suelo es el material de construcción permanente, como lo demuestran las ciudades prehistóricas con murallas de barro y los túmulos que se encuentran en muchas partes del mundo.

Fue solamente durante los años treinta del siglo pasado que los enfoques científicos para el uso del suelo y de la roca como material de construcción, comenzaron y han evolucionado los trabajos con tierra.

Actualmente es posible utilizar la tierra y la roca en la construcción de rellenos para soportar edificaciones, avenidas para el transito, subrasantes que puedan resistir las cargas concentradas de las ruedas, presas para el agua, etc.., en condiciones que antes se consideraban impropias. A pesar de los milenios de exitosa experiencia, las construcciones de tierra conducen a fracasos técnicos si no se tiene cuidado tanto en el proyecto como en la construcción.

La ESTABILIZACION DE SUELO es un asunto muy importante y si no se estudia seriamente puede tener consecuencias gravísimas

Algunos ejemplos con consecuencias gravísimas